Hola Chicas!!!
Espero se encuentren muy bien.
Hoy les quiero compartir un tema muy importante para mi, es el de las enfermedades trasmitidas por alimentos. Todo el mundo suele manipular alimentos, pero por lo general no sabemos como hacerlo de la forma correcta ya que desconocemos las diferentes enfermedades que se pueden transmitir a través de ellos por su incorrecta manipulación. A parte de las enfermedades que les comparto hoy , existen otras que se transmiten oral-fecal a través de alimentos que han sido contaminados por la mala higiene o higiene inadecuada, pero eso es todo un capitulo y dentro de este podemos encontrar las parasitosis como la amebiasis y la giardiasis. Hoy abarcaremos a un grupo distinto.
Les hago un resumen de las mas relevantes.
SHIGELOSIS
La Shigelosis es una infección bacteriana del intestino, causada por el genero Shigella. Su vía de transmisión es la oral-fecal, es decir, los infectados excretan las bacterias en sus heces y estas se pueden propagar al agua y alimentos o directamente a otras personas.
Los brotes de Shigella se asocian a condiciones sanitarias deficientes, agua y alimentos contaminados así como condiciones de hacinamiento. Es común entre los viajeros a países en vías de desarrollo y residentes en campos de refugiados. Se puede observar también en guarderías y residencias de ancianos.
Tiene un periodo de incubación de 1-7 días. Los síntomas pueden ser dolor abdominal, fiebre aguda, heces con sangre, moco o pus, dolor rectal con cólicos, vomitos y náuseas, diarrea acuosa.
El tratamiento consiste en reponer los líquidos y los electrolitos para evitar una deshidratación severa, en ocasiones son necesarios los antibióticos.
El pronóstico es bueno, puesto que la enfermedad puede desaparecer espontáneamente.
Dentro las complicaciones podemos ver la deshidratación grave, la artritis reactiva y síndrome hemolitico uremico (SHU).
Se puede prevenir con un manejo, almacenamiento y preparación adecuados de los alimentos, con buena higiene personal, con lavado las manos, evitando aa y alimentos que puedan estar contaminados.
BOTULISMO
Es una enfermedad rara, pero grave, causada por la bacteria Clostridium botulinum. Nos infectamos a través de alimentos contaminados o a través de heridas.
La bacteria vive en alimentos mal enlatados o mal conservados, en donde generan una neurotoxina. Existen siete tipos de toxinas, de las cuales 4 de ellas afectan al sistema nervioso humano.
Los alimentos enlatados o conservados en casa que con mas frecuencia se asocian al botulismo son los vegetales, la carne de cerdo, el jamón curado, el pescado crudo o ahumado, la miel y el jarabe de maíz.
Cada año en los EE.UU. se diagnostican alrededor de 10 casos de botulismo y la mayoría de ellos son lactantes.
Los síntomas pueden aparecer entre las 8 y 36 horas luego de la exposición. No produce fiebre y se suele manifestar con cólicos abdominales, náuseas, vómitos, dificultad respiratoria, dificultad para deglutir, dificultad para hablar, visión borrosa y debilidad muscular, que inicia desde la parte superior del cuerpo y va descendiendo.
Es muy importante acudir a un centro de salud lo antes posible, si se padecen estos síntomas relacionado con la ingesta de alimentos enlatados o en conservas.
El pronóstico de la enfermedad es bueno cuando se recibe el tratamiento oportuno, de no ser así el riesgo de muerte es elevado.
La prevención se puede llevar a cabo no dando miel o jarabe de maíz a niños menores de un año, descartando las latas que presenten abultamiento y alimentos en conservas con mal olor.
LISTERIOSIS
Es una infección causada por la bacteria Listeria monocytogenes. Por lo general es transmitida por alimentos contaminados.
Estas bacterias se encuentran en animales salvajes y domésticos, en el agua y en los suelos. Las verduras y carnes pueden resultar infectados si están en contacto con el suelo o estiércol contaminado. La leche no pasteurizada y productos derivados pueden aportar la bacteria.
Son población en riesgo los adultos mayores de 50 años, los fetos en desarrollo, los recién nacidos, las embarazadas, adultos con sistema inmune deficiente.
Se puede manifestar de diferentes maneras, con frecuencia causa una enfermedad gastrointestinal, pero puede ocurrir septicemia (infección en la sangre), meningitis (inflamación de las membranas que recubren el cerebro), endocarditis (infección del corazón), neumonía (infección de los pulmones), o de formas mas leves como abscesos, conjuntivitis y lesión cutánea.
En las embarazadas, si se infectan en el primer trimestre de embarazo puede provocarle un aborto espontáneo, al final del embarazo puede provocar la muerte del bebe al nacer o que muere días posteriores al nacimiento. El 50% de los bebés infectados a término o a pretérmino, morirá.
Los síntomas en los bebés pueden ser inapetencia, letargo, ictericia (coloración amarillenta de la piel), dificultad respiratoria, shock, rash cutáneo y vómitos. En los adultos los síntomas van a depender del órgano o sistema afectado.
El diagnóstico se puede confirmar con pruebas de laboratorio para detectar la bacteria ya sea en líquido amniótico, en líquido cefalorraquídeo, en sangre, en heces o en orina.
El pronóstico para los bebes y fetos en desarrollo es desalentador, ya que presenta una mortalidad muy elevada. En los adultos sanos el pronóstico es favorable.
Dentro de las posibles complicaciones se encuentran daño cerebral a largo plazo y retraso del desarrollo en los bebés que lograron superar la infección.
Se puede prevenir esta enfermedad transmitida por alimentos evitando, sobretodo las embarazadas, el contacto con animales salvajes y domésticos, evitar el consumo de quesos blandos, de carnes frías, productos sin pasteurizar y cocinar bien los alimentos.
CLOSTRIDIUM PERFRINGENS
La bacteria Clostridium perfringens puede causar una infección gastrointestinal, produce una de las tantas enfermedades transmitidas por alimentos (ETA) y por ende podemos prevenirla.
Esta bacteria se encuentra a menudo en carnes y aves crudas. Se estima que causa casi un millón de casos por año en los Estados Unidos.
Los alimentos mas comunes que pueden contener esta bacteria son las carnes, las aves, las salsas de carne, los precocidos, entre otros. Esta infección tienen lugar con frecuencia, cuando los alimentos se preparan en grandes cantidades y se mantienen calientes por largo período de tiempo antes de servirse, por lo cual los brotes son mas frecuentes en hospitales, comedores escolares, residencias de ancianos, prisiones, etc.
Los niños y los ancianos presentan mayor susceptibilidad.
Los síntomas se pueden presentar entre 6 y 24 horas luego de la ingesta y suelen ser diarrea y dolor abdominal.
El tratamiento tiene como objetivo evitar la deshidratación.
La prevención se puede hacer cocinando completamente los alimentos y luego de cocinados servirlos inmediatamente o mantenerlos en una temperatura mayor de 60 grados Celsius o menor de 5 grados Celsius.
Puede ser peligroso consumir alimentos que hayan permanecido fuera del refrigerador durante mucho tiempo, ya que aunque estén colonizados por la bacteria, no suele cambiar el olor, ni el sabor, ni la apariencia.
Dra. Shei – Medicina estética, nutrición y anti-envejecimiento